El cuerpo del periodista Luis Martín Sánchez fue encontrado en una bolsa de plástico en una zona rural de Tepic, Nayarit. Sánchez fue secuestrado violentamente de su casa el 5 de julio y su cuerpo presentaba signos de tortura. Este asesinato marca un mes sangriento para la prensa en México, ya que diez días después otro reportero fue atacado a balazos en Acapulco.
En lo que va del año, siete periodistas han sido asesinados en México, siendo ya 41 los periodistas asesinados durante el actual sexenio. El 98% de estos crímenes permanece en la impunidad debido a la falta de voluntad política para esclarecerlos. Artículo 19 advierte que México es uno de los países más peligrosos del mundo para ejercer el periodismo.
Cada 13 horas se registra un ataque contra la prensa en México, que va desde amenazas y agresiones hasta secuestros y asesinatos. La mayoría de la violencia contra los periodistas proviene de funcionarios públicos, personas privadas y el crimen organizado. La falta de confianza en el sistema de justicia lleva a que la mayoría de los periodistas no presenten denuncias cuando son agredidos.
El presidente López Obrador ha desatado una campaña de desprestigio contra la prensa, lo que agrava aún más la situación de violencia. Las autoridades mexicanas han sido negligentes en garantizar la seguridad de los periodistas, lo que ha llevado a un aumento en los asesinatos. Se necesita voluntad política y mejores recursos para proteger a los periodistas y garantizar su seguridad en México.
Title: Periodista asesinado en México destaca la violencia contra la prensa
Subtitle: México se convierte en uno de los países más peligrosos para los periodistas
El cuerpo del periodista Luis Martín Sánchez fue encontrado en una bolsa de plástico en una zona rural de Tepic, Nayarit, marcando un mes sangriento para la prensa mexicana. El reportero fue secuestrado violentamente de su casa el pasado 5 de julio y su cuerpo presentaba signos de tortura.
Este terrible suceso se suma a la escalada de violencia contra los periodistas en México, donde en lo que va del año siete han sido asesinados. En total, durante el actual sexenio ya son 41 los periodistas asesinados, y lo más alarmante es que el 98% de estos crímenes permanece en la impunidad debido a la falta de voluntad política para esclarecerlos.
La organización Artículo 19 advierte que México se ha convertido en uno de los países más peligrosos del mundo para ejercer el periodismo. Cada 13 horas se registra un ataque contra la prensa en el país, que va desde amenazas y agresiones hasta secuestros y asesinatos. Además, la mayoría de la violencia proviene de funcionarios públicos, personas privadas y el crimen organizado.
La falta de confianza en el sistema de justicia también juega un papel importante en esta problemática. La mayoría de los periodistas no presenta denuncias cuando son agredidos, lo que contribuye a la impunidad reinante. Esta situación se agrava aún más con la campaña de desprestigio que ha desatado el presidente López Obrador contra la prensa.
Las autoridades mexicanas han sido negligentes en garantizar la seguridad de los periodistas, lo que ha llevado a un preocupante aumento en los asesinatos. Es imprescindible que se destine mayor voluntad política y mejores recursos para proteger a los periodistas y garantizar su seguridad en México.
La situación actual exige una respuesta inmediata y contundente por parte del Gobierno, así como el fortalecimiento de los mecanismos de protección a los periodistas. No se puede permitir que la violencia contra la prensa siga avanzando y silenciando a aquellos que ejercen su labor de informar y denunciar.
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