La abstención triunfa en las elecciones en Irán
La abstención fue la gran triunfadora de las recientes elecciones en Irán, con un preocupante 41% de participación, la cifra más baja desde la creación del régimen hace 45 años. En la capital, Teherán, solo un 24% del censo acudió a votar.
Los candidatos conservadores y ultraconservadores son los favoritos para ganar escaños en el Parlamento, luego de que el Consejo de los Guardianes excluyera a candidaturas liberales y reformistas. Además, se eligieron 88 miembros de la Asamblea de Expertos para supervisar al líder supremo de la Revolución.
A pesar de que el presidente Ebrahim Raisi se congratuló por la participación masiva, la sociedad iraní ha mostrado su rechazo al régimen con la alta abstención. La crisis económica y la represión a las protestas han influido en esta baja participación.
La teocracia islámica enfrenta problemas a nivel internacional, siendo responsabilizada de una ofensiva bélica contra Israel y Estados Unidos. Existe preocupación por una posible guerra a gran escala en Oriente Medio debido a la escalada de tensiones.
En resumen, las elecciones en Irán reflejan un claro descontento del pueblo iraní hacia el régimen actual, con una alta abstención que pone en duda la legitimidad de los resultados y la estabilidad del país en medio de la crisis económica y las tensiones internacionales.