Investigadores del Grupo de Cabeza y Cuello y de la Unidad de Terapia Molecular del Cáncer del Vall d’Hebron Instituto de Oncología han llevado a cabo un estudio en el que se ha probado la seguridad de un nuevo fármaco epigenético para el tratamiento de tumores sólidos avanzados.
Este estudio, cuyos resultados han sido publicados en la revista ‘Clinical Cancer Research’, presenta los hallazgos preliminares del primer ensayo en humanos con este fármaco. En el estudio se ha identificado la dosis máxima tolerada y recomendada para un ensayo de fase II, demostrando una toxicidad manejable dependiente de la dosis y actividad antitumoral preliminar en pacientes con tumores de glándula salival.
El fármaco en cuestión, denominado ‘JNJ-64619178’, es un inhibidor de la proteína PRMT5, la cual está involucrada en la unión de marcas epigenéticas al ADN. Estudios previos han demostrado que este fármaco tiene efectos antitumorales en modelos preclínicos.
El primer ensayo clínico en humanos con este fármaco fue liderado por la Unidad de Investigación de Terapia Molecular del Cáncer, en el que participaron un total de 90 pacientes con diferentes tipos de tumores sólidos avanzados. Los efectos adversos más frecuentes registrados durante el ensayo fueron de naturaleza hematológica y gastrointestinal, aunque en general el fármaco fue bien tolerado por los pacientes.
Este estudio forma parte de la investigación llevada a cabo por el Grupo de Tumores de Cabeza y Cuello del VHIO, con el fin de desarrollar fármacos epigenéticos que desactiven genes relacionados con el cáncer. Los resultados obtenidos hasta el momento son prometedores y sugieren que este nuevo fármaco podría convertirse en una opción de tratamiento eficaz para los pacientes con tumores sólidos avanzados.
Con estos avances en el campo de la terapia molecular del cáncer, se abre una nueva esperanza para aquellos pacientes que luchan contra esta enfermedad. Los investigadores continúan trabajando en la mejora de estos fármacos para lograr tratamientos más efectivos y menos tóxicos, con el objetivo final de mejorar la calidad de vida de los pacientes y reducir la carga del cáncer en la sociedad.
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