El precio de la luz aumentó hoy, afectando a aquellos usuarios que no aprovecharon las horas más económicas durante la madrugada para utilizar sus electrodomésticos de alto consumo. Durante el periodo de 01:00 a 05:00 de la madrugada, el precio fue de 4,3 euros por megavatio hora (MWh). Con el objetivo de reducir su factura eléctrica mensual, muchos usuarios buscarán aprovechar estas horas más baratas, realizando tareas como lavar la ropa durante la madrugada.
Se ha establecido que el precio máximo de la luz será de 95,72 euros/MWh entre las 21:00 y las 22:00 horas, mientras que el precio mínimo será de 4,3 euros/MWh entre las 02:00 y las 06:00 horas. Para mañana, se espera que el precio de la luz sea inferior a los 10 euros/MWh durante cinco horas en la madrugada, y no supere los 100 euros/MWh en ningún momento del día.
Este aumento en el precio de la luz se encuentra controlado gracias a la llegada de borrascas que favorecen la generación eólica y las precipitaciones. Estos factores permiten mantener bajo el precio de la energía eléctrica.
Además, se ha decidido extender hasta el 31 de diciembre la llamada “excepción ibérica”, evitando que los consumidores tengan que compensar a las empresas gasistas. El acuerdo alcanzado entre España, Portugal y la Comisión Europea implica ajustes en el mecanismo de esta excepción, como una referencia de precios más suave. Actualmente, este mecanismo no tiene efecto debido a la disminución en el precio del gas natural, pero la prórroga permitirá mantener un precio razonable y no depender tanto de la evolución de este recurso natural.
En conclusión, el precio de la luz ha aumentado y esto ha afectado a aquellos usuarios que no aprovecharon las horas más económicas durante la madrugada para utilizar sus electrodomésticos de alto consumo. Sin embargo, se espera que gracias a la llegada de borrascas y precipitaciones, el precio se mantenga bajo. También se ha extendido la excepción ibérica hasta finales de año, lo que evitará que los consumidores tengan que compensar a las empresas gasistas. Estos ajustes permitirán mantener un precio razonable y no depender tanto de la evolución del gas natural.
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